Tras la pandemia mundial, las actividades se están normalizando; sin embargo, no dejamos de bajar la guardia. Hay una reapertura total de escuelas, negocios, oficinas, centros comerciales y centros recreativos y cada cual busca los mejores protocolos sanitarios para sus colaboradores y clientes.

Una opción muy utilizada en sector salud desde hace muchos años, novedosa en este proceso, han sido las lámparas germicidas de luz ultravioleta superior, también conocidas como lámparas UVGI, que han sido grandes auxiliares en tareas de desinfección del aire. De hecho, la Organización Mundial de la Salud, las ha recomendado para áreas de hospitales y clínicas con enfermedades infecto contagiosas como Tuberculosis.

Sin embargo, cada vez más espacios públicos están optando por estos dispositivos prácticos, efectivos y avalados por instituciones como CDC, EPA, La Casa Blanca de EU, OMS, ASHRAE, entre otros.

Funcionamiento de las lámparas germicidas UVGI

Las lámparas germicidas superior funcionan por medio de la energía radiante ultravioleta para inactivar bacterias, virus, hongos y moho. Este tipo de luz UV de longitud de onda corta tiene una banda espectral 254 nanómetros.

Esta energía radiante daña los enlaces del ADN y el ARN, evitando su reproducción. Por tanto, mata elementos como las bacterias, pero inactiva elementos como los virus, que no son organismos vivos, pero cuentan con material bilógico con ARN.

Características destacadas de las lámparas germicidas UVGI

Seguridad

Las lámparas germicidas UV, son seguras, siempre y cuando el usuario siga las recomendaciones de un profesional dedicado a instalar y diseñar un sistema de luz ultravioleta efectivo y seguro.  Es importante evitar el contacto con ojos y piel directo, ya que son para el ambiente y las superficies, no para desinfectar de forma directa a los humanos.

Aplicaciones

Como comentamos, las lámparas germicidas superior solo están orientadas a la desinfección del aire en espacios ocupados. De ningún modo deben usarse para desinfectar manos o cualquier otra parte de la piel.

Las lámparas germicidas de colocación en la parte superior del espacio, es decir, para empotrarse en una pared. Desinfectan el aire en grandes volúmenes a la vez y funcionan completamente independiente al sistema HVAC.

Se recomienda instalarse en espacios donde la ventilación es limitada o hay una alta densidad de personas. Esta tecnología logra mínimo 17ACH en un espacio, logrando una tasa de ventilación casi como un quirófano.

Se puede instalar en oficinas, call centers, restaurantes, iglesias, consultorios, hospitales, escuelas, etc.

Recomendaciones de uso

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